Si te gusta estar al día de la actualidad nacional seguro que habrás oído hablar del plagio en los trabajos académicos universitarios.

Lo cierto es que ha sido un tema candente en los últimos tiempos porque ha salpicado a algunos ex altos cargos del gobierno.

Este problema ha estimulado la adquisición de sistemas antiplagio por parte de muchas universidades españolas para detectar posibles fraudes en tesis doctorales, trabajos de fin de máster (TFM) y trabajos de fin de grado (TFG).

¿Sabes qué son y cómo funcionan los sistemas antiplagio? Si eres estudiante universitario esta información te interesa puesto que el plagio puede suponer graves consecuencias en la carrera académica.

Sistemas antiplagio: por qué se ha extendido su uso

Tal y como define la RAE, plagiar implica “copiar en lo sustancial obras ajenas, dándolas como propias”. El plagio en el mundo académico ha existido siempre, aunque previo al nacimiento de las nuevas tecnologías el proceso resultaba mucho más laborioso.

Antes había que acudir a la biblioteca o adquirir bibliografía especializada para transcribir directamente desde las fuentes consultadas.

Sin embargo, la llegada de Internet ha supuesto un atisbo importante para muchos pícaros que han tirado de él para sacar adelante trabajos académicos sin desarrollar contenido original.

Hoy en día, cualquier alumno utiliza diferentes dispositivos móviles en su día a día como un ordenador o un smartphone. Desde estos aparatos tiene a un solo clic de distancia una cantidad ingente de información sobre la temática que centra sus estudios. De tal forma que, plagiar, es muy sencillo.

Pero… ¿es en realidad el plagio académico un hábito tan extendido? Un informe de investigación dirigido por J. Sureda y R. Comas y elaborado entre estudiantes de la UIB (Universidad de las Islas Baleares) en 2008 puso cifras al respecto.

El estudio manifestó que cerca del 80% del alumnado encuestado reconocía haber hecho “copy-paste” de fragmentos de contenido extraídos de Internet sin haber referenciado la fuente.

La cifra es realmente elevada, quizás tú mismo hayas recurrido alguna vez al “copia y pega” para realizar tus trabajos académicos, incluso a sabiendas de que no estabas siendo honesto ni con el profesor ni contigo mismo.

Hay quien ha decidido llevar esta acción hasta sus máximas consecuencias plagiando en documentos tan importantes para la vida académica como un TFG e incluso una tesis doctoral.

Los motivos que llevan a plagiar son muchos y variados. Los estudiantes alegan desde la falta de tiempo para crear contenido original hasta la no percepción de que están cometiendo una falta grave. La comodidad y la justificación de que el resto de compañeros también lo hace son otros de los motivos.

¿Qué son y cómo funcionan los sistemas antiplagio?

El auge del plagio ha llevado a muchas universidades españolas a dotar a sus docentes con instrumentos capaces de detectar la copia en los trabajos académicos. Son los sistemas antiplagio.

Estas herramientas no son solo útiles para los profesores sino también para aquellos alumnos que necesitan comprobar el nivel de originalidad de un texto concreto.

Los sistemas antiplagio son softwares diseñados para verificar un contenido original. Su función reside en comparar el texto con amplísimas bases de datos que incluyen todo tipo de documentos. De esta forma, pueden detectar qué parte del texto es contenido original y cuál ha sido plagiado de alguna fuente previa.

Las bases de datos de los sistemas antiplagios están compuestas por miles de documentos en diferentes formatos como Word, PDF, .txt o PPT. Además, también cotejan los trabajos con la información online que aparece en páginas web, blogs, e incluso en publicaciones de redes sociales.

Una vez hecho el estudio, el software antiplagio arroja los resultados filtrando aquellos contenidos copiados e indicando el porcentaje de similitud con otras fuentes.

En el mercado existe gran variedad de sistemas antiplagio, algunos de ellos son de pago como Turnitin, utilizado por el 70% de las universidades españolas. Entre los sistemas antiplagio de uso gratuito podemos destacar los siguientes.

6 sistemas antiplagio gratuitos

• Copyscape: Permite analizar ULRs y las coteja con información disponible en red. Posee planes premium con mayores funcionalidades.
• Plagium: A través de este software se pueden verificar de forma rápida los contenidos originales. Además, indica las fuentes de las que ha sido extraído en caso de ser texto plagiado.
• PlagScan: Este sistema antiplagio admite la subida de archivos de diferentes formatos para ser escaneados en busca de analogías con otros contenidos en red. Los resultados que arroja se ordenan en función del grado de similitud con otros textos.
• Dupli Checker: Otro detector de plagio muy fácil de utilizar para hacer un barrido rápido sobre aquellos textos sospechosos.
• Doc Cop: Muy útil para comparar documentos entre sí.
• Google: El rey de los buscadores se puede convertir en otro útil sistema antiplagio. Para ello basta con introducir el fragmento de texto sospechoso entre comillas y hacer clic en buscar.

Estos son algunos de los sistemas antiplagio que puedes emplear para chequear y verificar aquellos contenidos que dudes sean originales.

Recuerda que añadir un fragmento de texto ya existente a un trabajo académico es correcto si se realiza de la forma adecuada: atribuyendo la autoría al creador original a través de la cita bibliográfica. El plagio universitario no es, para nada, recomendable ya que puede suponer la suspensión inmediata e incluso acarrear peores consecuencias.

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