¿Estás a punto de alcanzar tu titulación universitaria y piensas en ampliar tus estudios? ¿O quizá buscas ampliar tus salidas laborales? Entre las diferentes opciones que tienes a tu alcance están cursar un máster o acceder a un título de posgrado.

Pero… ¿tienes claras las diferencias entre un máster y un posgrado? ¿Sabes qué tipo de formación te conviene más para tu futuro profesional?

Si todavía no tienes respuesta a estas dos preguntas, echa un ojo al post. Vas a descubrir los 4 rasgos que distinguen a un máster de un posgrado.

Con esta información en mano te resultará mucho más sencillo tomar la decisión respecto a qué seguir estudiando tras acabar la universidad.

4 diferencias entre un máster y un posgrado para ayudarte a decidir

A menudo se utilizan los términos máster y posgrado de forma indistinta para referirse a los mismos estudios. Esto es un error. Ahora vas a ver por qué estas dos titulaciones son muy diferentes de lo que puedan parecer a primera vista.

Los dos únicos rasgos comunes entre máster y posgrado es que ambos son estudios de nivel superior (se pueden cursan tras finalizar una carrera universitaria y por ello se conocen de forma genérica como estudios de posgrado), y que los dos conducen a una especialización profesional.

A continuación, te contamos las 4 diferencias entre un máster y un posgrado más significativas que necesitas conocer.

#1 Duración y carga lectiva de la formación

La principal diferencia entre máster y posgrado es la duración y la carga lectiva de ambas formaciones.

El máster consta de entre 60 y 120 créditos ECTS, y su duración se reparte entre uno o dos cursos académicos. Además, el máster incluye la elaboración, presentación y defensa de un Trabajo de Fin de Máster.

Por su parte, el posgrado (también denominado postgrado) tienen una carga lectiva más reducida, entre 30 y 60 créditos ECTS. Por lo tanto, su duración es inferior respecto a los estudios de máster.

#2 Acceso al programa de estudios

Como requisito indispensable para cursar un máster se contempla que el alumno esté en posesión de un título universitario: grado, diplomatura o licenciatura.

En cambio, para acceder a un posgrado no es obligatorio tener formación universitaria. En algunas formaciones de posgrado aceptan participantes sin titulación.

En ocasiones, sí que exigen al menos tener experiencia laboral en el ámbito de campo o bien superar una prueba de acceso donde se evalúan determinadas competencias mínimas.

Además, debes saber que dentro de los másters puedes elegir entre propios u oficiales. En cambio, los estudios de posgrado son siempre propios.

#3 Título que se obtiene

Tras cursar un máster tendrás en tu mano un título que te acredita como Magíster. Es considerado superior frente al título que ofrece el posgrado en el sentido de que estando en posesión de la titulación de máster se sobreentiende que tienes estudios universitarios.

Así pues, Magíster es la titulación superior más alta a la que puedes acceder. Por encima de ella tan solo se sitúa el doctorado.

Si optas por cursar un posgrado, al finalizar recibirás el diploma de posgrado. En caso de haber accedido a esta formación sin titulación universitaria, obtendrás lo que se conoce como “certificado de aprovechamiento”.

#4 Objetivo de los estudios

Hemos dejado para el final la diferencia entre máster y posgrado que consideramos más importante, y en la que te aconsejamos que bases tu decisión final.

El máster ofrece una formación avanzada orientada a la especialización en un área en concreto a través de una visión estratégica y más global respecto a la temática de estudio.

Asimismo, el máster puede estar dirigido a la preparación en labores investigadoras en caso de que te plantees cursar un doctorado.

Por otro lado, el posgrado es un tipo de formación más enfocada a la profesionalización dentro de un ámbito de especialización mucho más concreto y específico. Por este motivo, tiene una duración más corta e incluso muchas veces se realiza tras cursar un máster como especialidad.

¿Qué formación es mejor: máster o posgrado?

Lo cierto es que no hay un plan de estudios que prevalezca o sea mejor que el otro. Lo más importante es que tengas claro tu objetivo para escoger el tipo de formación que más se adecúe a la consecución de esa meta que te has fijado.

Sea cual sea tu elección, tanto un máster como un posgrado van a ofrecerte un montón de conocimiento nuevo. Estas formaciones superiores son un paso más en ese viaje emocionante hasta alcanzar tus sueños profesionales. ¡Adelante con ello!

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